Muchos de nosotros consideramos que
lo que estamos haciendo es bueno es más nos sentimos satisfechos con los
resultados de lo que hacemos, pero llega un día donde a través de capacitarnos
en lo que hacemos nos damos cuenta que lo bueno que estamos haciendo no es tan
buen.
No porque hayamos descubierto que está
mal, sino que ahora nos damos cuenta que lo pudiéramos hacer mucho mejor o que
podríamos sacar mucho más provecho de eso que hacemos.
Tú
tienes una máquina de coser la cual siempre la manipulas de la misma forma y lo
que haces te queda bien.
Pero un día descubres un manual, un
tutorial o alguien que sabe más que tú te explica la manera correcta de
manipular la máquina y te das cuenta que la forma como lo estabas haciendo no
es la mejor, que no estas aprovechando a lo máximo tu máquina.
Cuando nos pasa esto nos
preguntamos: ¿y cómo cosía si no era la mejor manera? Nuestra vida es como esa máquina
que posiblemente funciona muy bien pero Jesucristo sabe que podemos funcionar
mejor.
Este era el caso del Rey Josías. Era
un hombre que no conocía de Dios pero tenía una vida excelente, dentro de su excelencia entendía que su vida podía ser
mejor.
1. Era un Hombre correcto, hacia
siempre lo Bueno. V 1-2 “De ocho años era Josías cuando comenzó a reinar, y treinta y un
años reinó en Jerusalén. 34:2 Este hizo lo recto ante los ojos de Jehová, y
anduvo en los caminos de David su padre, sin apartarse a la derecha ni a la
izquierda.” muchos de nosotros aunque no conocíamos de
Jesucristo teníamos una vida organizada, hay gente en el mundo que es mejor que
cualquier cristiano.
Tú
puedes ser una persona que sin Jesucristo en tu corazón, posiblemente
hagas las cosas muy bien, el Rey como toda persona sabía e inteligente entendía
que tenía que seguir mejorando.
2. Comenzó a Buscar de Dios. V 3 a
“A los ocho años de
su reinado, siendo aún muchacho, comenzó a buscar al Dios de David su padre;”
Jesucristo hace que nuestra vida vaya de lo bueno a lo mejor y de lo mejor a lo
excelente.
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2.1. No solo debemos buscar a Jesucristo cuando
estamos mal, debemos buscarlo cuando estamos bien, con el ánimo de seguir
estando Bien.
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2.2. Debemos Buscar a Jesucristo por agradecimiento. A
Jesucristo lo que más le molesta es que después de que él nos ayuda no
regresamos para Agradecer. Lucas 17: 15- 17 “Entonces uno de ellos,
viendo que había sido sanado, volvió, glorificando a Dios a gran voz, 17:16
y se postró rostro en tierra a sus pies, dándole gracias; y éste era
samaritano. Respondiendo Jesús, dijo: ¿No son diez los que fueron
limpiados? Y los nueve, ¿dónde están?”
3. Cuatro años después se dio
cuenta que debía quitar algunas cosas de su vida. V 3 b “y a los doce años
comenzó a limpiar a Judá y a Jerusalén de los lugares altos, imágenes de Asera,
esculturas, e imágenes fundidas.” sin Jesucristo pensamos que
nuestra forma de adorarlo es la correcta y que lo que hacemos está muy bien, Jesucristo
nos abre los ojos espirituales y nos damos cuenta que no todo está bien.
4. Con el Pasar de los años también
se dio cuenta que para seguir avanzando en sus victorias era necesario
Preocuparse por el cuidado y mantenimiento del Templo la casa de Dios. V 8 “A los dieciocho años
de su reinado, después de haber limpiado la tierra y la casa, envió a Safán
hijo de Azalía, a Maasías gobernador de la ciudad, y a Joa hijo de Joacaz,
canciller, para que reparasen la casa de Jehová su Dios.” Si es
Dios quien nos da todo lo que tenemos entonces porque no retribuir en algo de
manera física.
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4.1. Dios no come. Dicen algunos para justificar su
falta de agradecimiento a Dios.
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4.2. Dios no necesita plata dicen otros. La verdad es
que Dios no come ni necesita plata, pero la única forma de la gente acercarse a
Dios de manera verdadera es a través de las organizaciones Religiosas y para
mantener estas instituciones si se necesita del Dinero. V 9 “Vinieron estos al
sumo sacerdote Hilcías, y dieron el dinero que había sido traído a la casa de
Jehová, que los levitas que guardaban la puerta habían recogido de mano de
Manasés y de Efraín y de todo el remanente de Israel, de todo Judá y Benjamín,
y de los habitantes de Jerusalén.”
5. Debemos entender que es la
Palabra de Dios la que nos hace Crecer y desarrollar de manera constante. 14-15
“Y al sacar el dinero
que había sido traído a la casa de Jehová, el sacerdote Hilcías halló el libro
de la ley de Jehová dada por medio de Moisés.
34:15 Y dando cuenta Hilcías, dijo al escriba Safán: Yo he hallado el libro de la ley en la casa de Jehová. Y dio Hilcías el libro a Safán.” el libro de la ley lo tenían olvidado, como muchos de nosotros, refundida la biblia en la biblioteca o encima del televisor.
34:15 Y dando cuenta Hilcías, dijo al escriba Safán: Yo he hallado el libro de la ley en la casa de Jehová. Y dio Hilcías el libro a Safán.” el libro de la ley lo tenían olvidado, como muchos de nosotros, refundida la biblia en la biblioteca o encima del televisor.
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5.1. La palabra de Dios es más que un libro religioso,
a través de la biblia, Jesucristo nos instruye
o nos prepara para que lleguemos a ser personas de éxito en todo. 2 Timoteo 3:
16-17 “Toda la Escritura es
inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para
instruir en justicia, 3:17 a fin de que el hombre de Dios sea perfecto,
enteramente preparado para toda buena obra.”
6. La palabra de Dios nos hace ver
que siempre tenemos algo más por mejorar. V 19- 22 “Luego que el rey oyó
las palabras de la ley, rasgó sus vestidos; 34:20 Y mandó a Hilcías y a
Ahicam hijo de Safán, y a Abdón hijo de Micaía, y a Safán escriba, y a Asaías
siervo del rey, diciendo: 34:21 Andad, consultad a Jehová por mí, y por
el remanente de Israel y de Judá, acerca de las palabras del libro que se ha
hallado; porque grande es la ira de Jehová que ha caído sobre nosotros, por
cuanto nuestros padres no guardaron la palabra de Jehová, para hacer conforme a
todo lo que está escrito en este libro. 34:22 Entonces Hilcías y los del
rey fueron a Hulda profetisa, mujer de Salum hijo de Ticva, hijo de Harhas,
guarda de las vestiduras, la cual moraba en Jerusalén en el segundo barrio, y
le dijeron las palabras antes dichas.” los seres
humanos somos conformistas o acomodados, Jesucristo es exigente.
7. No es suficiente conque tan solo
una persona quiera prosperar a través del conocimiento que ofrece Jesucristo.
Es necesario que se involucre a toda la Familia. V 30 “Y subió el rey a la
casa de Jehová, y con él todos los varones de Judá, y los moradores de
Jerusalén, y los sacerdotes, los levitas y todo el pueblo desde el mayor hasta
el más pequeño; y leyó a oídos de ellos todas las palabras del libro del pacto
que había sido hallado en la casa de Jehová.”
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7.1. Es necesario hacer pacto de compromiso en
cuestión de obediencia a la palabra de Dios. V 31 “Y estando el rey en
pie en su sitio, hizo delante de Jehová pacto de caminar en pos de Jehová y de
guardar sus mandamientos, sus testimonios y sus estatutos, con todo su corazón
y con toda su alma, poniendo por obra las palabras del pacto que estaban
escritas en aquel libro.” de nada sirve conocer los
mandamientos o los pasos para lograr el éxito si no los queremos hacer.
7.2. Igualmente el compromiso debe
asumirse por todos los miembros de la familia o al menos todos los que quieran
recibir los Beneficios. V 32 “E hizo que se obligaran a ello todos los que estaban en Jerusalén y
en Benjamín; y los moradores de Jerusalén hicieron conforme al pacto de Dios,
del Dios de sus padres.”
Nosotros podemos hacer las cosas
bien sin tener a Jesucristo en nuestro corazón, pero con Jesucristo podemos
avanzar mucho más lejos y tener muchos otros logros que sin él no sería
posible. Tú decides si quieres seguir haciendo lo bueno en tus fuerzas o
multiplicar los logros con la ayuda de Jesucristo.